Estiman que iCrop recaudará 1,5 millones de dólares mensuales por el control a las slots en Paraguay

La semana pasada, se desató una nueva controversia en el mercado de juegos paraguayo, cuando el ex titular de la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar), Javier Balbuena, denunció que se había “privatizado” el control sobre el uso de las tragamonedas en el país.

Según las declaraciones de Balbuena, la Conajzar “le autorizó a una empresa privada a que realice un censo, un catastro, a que controle, que fiscalice y a que cobre canon” en octubre de 2020.

Así, el ex titular aseguró que “cuando se destruye la institucionalidad es donde yo me revelo y donde estoy haciendo declaraciones inclusive en varios medios, porque cuando la Conajzar le autoriza a una empresa privada a que cumpla sus propias funciones, prácticamente lo que hace es estar tercerizando las funciones de la Conajzar. Se privatizó Conajzar”.

Ahora, en un informe del medio local ABC, se estimó que “teniendo en cuenta que el compromiso de regulación es de 50.000 tragamonedas, la compañía reportará una ganancia de 10.597 millones de guaraníes al mes, que al tipo de cambio actual supera los 1,5 millones de dólares, mientras que el Estado recibirá unos 652.229 dólares al mes”.

Además, el asesor Luis Rojas dijo que “Conajzar y iCrop S.A. apuntan a crear una estructura de lavado de dinero, ya que esa cantidad de máquinas es imposible que esté activa en el país”. 

Por su parte, la Cámara de Senadores le pidió a Conajzar que presente un informe sobre la empresa iCrop, para saber “desde cuándo esta empresa actúa, qué capital tiene, qué experiencia tiene”, según Esperanza Martínez, presidenta de la Comisión del Senado.

Asimismo, la senadora Esperanza Martínez de Paraguay ha asegurado que el contrato entre iCrop S.A. y Conajzar aún continúa vigente, a pesar de los pedidos para suspenderlo por las facultades que le habría concedido el regulador del juego local a la empresa privada. Martínez sostiene que este contrato se trata de uno diseñado para cubrir una “privatización irregular, monopólica y dirigida para alzarse con millonarias ganancias”.